Redacción/El Nacional
Los bomberos de la provincia de Alberta en Canadá, declararon el incendio que desalojó a 90 mil personas de sus hogares como un “estado de emergencia”, al no poder ser controlado.
El incendio que se encuentra ardiendo desde el domingo 1 de mayo los alrededores de la ciudad de Fort McMurray, Alberta ha destruido más de 1500 casas y otras edificaciones en los alrededores.
La primera ministra de Alberta, Rachel Notley aseguró que el cuerpo de bomberos ha evitado que las llamas lleguen al centro de la ciudad, sin embargo, sus esfuerzos no han sido suficientes.
Por su parte, el jefe de bomberos de Fort McMurray, Darby Allen calificó como “catastrófico” el siniestro que hasta ahora, ha consumido más de 10 mil hectáreas de bosque.
Agregó que sus colegas consiguieron extinguir el fuego de los edificios de la ciudad, pero advirtió que debido a las condiciones meteorológicas les es imposible extinguir las del bosque y predecir si las llamas volverán a la ciudad.
Así mismo, se reveló que las altas temperaturas y los fuertes vientos están alimentando el fuego forestal que incendió en la noche el domingo el corazón petrolero de Canadá.
Las aproximadamente 90 mil personas evacuadas se dirigieron hacia el norte a instalaciones de refugio establecidas especialmente en Edmonton, capital de Alberta a unos 400 km de Fort McMurray.
Las autoridades advirtieron que la ciudad de 100 mil habitantes será inhabitable por algún tiempo, pues se prevé que los daños que deje el fuego sean considerables en algunos barrios sólo quedan cenizas y carcasas calcinadas.
Los vuelos del aeropuerto de la ciudad han sido suspendidos ante la fuerte amenaza da llamas. Hasta el momento, no se han registrado víctimas mortales.
Se espera que el fuego pueda ser controlado este sábado al pronosticarse que las temperaturas de la noche bajarán de 30 grados centígrados a unos 16 grados con posibilidad de lluvi.