Redacción/El Nacional
Cada año, el primer martes del mes de mayo se celebra el Día Mundial del Asma, que es una enfermedad crónica que no tiene cura, que se caracteriza por ataques recurrentes de falta de aire y sibilancias, que además afecta entre el 10 y 15 por ciento de la población mexicana.
En el mundo hay casi 300 millones de personas asmáticas en el mundo y cerca de un 11 por ciento de los afectados son niños entre 6 y 7 años, un 9 por ciento son adolescentes de entre 13 y 14 años mientras que alrededor del 5 por ciento es gente adulta.
En el marco del Día Mundial del Asma, el médico alergólogo Jorge Huerta Romero, señaló que los ataques por falta de aire en los pacientes que presentan la enfermedad varían en severidad y frecuencia de una persona a otra.
El especialista destacó que los síntomas pueden sobrevenir varias veces al día o a la semana, y en algunas personas se agravan durante la actividad física o por la noche.
Así mismo explicó que no existe una cura total para este mal, sin embargo, puede ser controlado al ser detectado a tiempo y atendido de manera inmediata.
Huerta Romero aseguró que el asma es un padecimiento que afecta la calidad de vida, la productividad debido a que es una enfermedad muy costosa, considerada como un problema de salud pública.
