Son la cuarta causa de mortalidad a nivel nacional
Panorama actual de las enfermedades hepáticas en México
Ocasiona la defunción de alrededor de 25 mil personas al año en el pías
José Daniel López/El Nacional
El Hospital San José en colaboración con expertos de su Centro de Enfermedades Hepáticas, Digestivas y Nutrición Clínica realizaron el simposium (programa de conferencias) “Panorama Actual de las Enfermedades Hepáticas en México”, con el objetivo de hacer conciencia y alertar a la sociedad acerca de esta situación patológica que vive el país; sus causas, consecuencias, tratamiento, avances tecnológicos y prevención.
“La cirrosis hepática es una alteración de la estructura del hígado, que consiste en la substitución del tejido funcional por el tejido cicatrizal, esta acumulación de tejido fibroso es causada por un proceso que inflama el hígado por largo tiempo, a esto se le llama hepatitis crónica, La hepatitis crónica es asintomático en la mayoría de los casos, y la única forma de detectarla es a través de exámenes de laboratorio y un estudio de imagen”, explicó el doctor Carlos Alberto Rodríguez Montalvo, Director del Centro de Enfermedades Hepáticas, digestivas y Nutrición Clínica.
Causas
Las enfermedades cónicas hepáticas, como la cirrosis y sus complicaciones son frecuentemente causadas por: consumo excesivo de alcohol, infecciones causadas por virus (Hepatitis B y C) y enfermedad grasa del hígado, propiciada por el sobrepeso y la obesidad.
“Hoy tenemos un gran problema: la obesidad, ya que ésta lleva a algunos pacientes a desarrollar enfermedad grasa del hígado. Por eso es de gran importancia la prevención y el diagnóstico temprano ya que en muchos casos la inflamación cónica (hepatitis crónica) se puede resolver con un manejo adecuado. Cuando vemos a pacientes con cirrosis y complicaciones de la misma, como insuficiencia hepática o cáncer, es demasiado tarde y la única alternativa es un transplante”, mencionó el también Jefe del Programa de Trasplante del Hígado del Hospital San José, el doctor Carlos Alberto Rodríguez Montalvo.
Consecuencias
Entre las principales consecuencias y complicaciones tenemos: cáncer primario de hígado, hemorragia por várices del tubo digestivo, desnutrición, infecciones y la falla completadle órgano. Todas estas si no se detectan a tiempo y se lleva el tratamiento adecuado, ocasionan la muerte.
Tratamientos y avances tecnológicos
En la actualidad, el Hospital San José, en su Centro de Enfermedades Hepáticas, Digestivas y Nutrición Clínica ofrece atención en padecimientos hematológicos especializados en: hepatología clínica, enfermedad hepática, cirrosis biliar primaria y enfermedades de los conductos biliares, cirrosis y sus complicaciones, soporte hepático MARS (hígado artificial), cirugía hepatobiliar y transplante hepático, tumores hepáticos, hipertensión portal, enfermedades de los conductos biliares, cirugía de invasión mínima de hígado y vías biliares, entre otros.
El centro también cuenta con la tecnología de punta como el FibroScan, dispositivo médico que proporciona de manera ambulatoria y no invasiva la medición de la rigidez del hígado para detectar pacientes con fibrosis severa y cirrosis.
Prevención
Lo recomendado es acudir a una revisión médica cada dos o tres años, someterse a una prueba de función hepática (prueba de sangre) y un eco abdominal superior, estos son estudios básicos suficientes para detectar si hay alguna alteración en las funciones hepáticas o estructurales del hígado. Pero a un paciente diagnosticado previamente con hepatitis crónica de cualquier etiología debe revisarse como mínimo cada seis meses, aunque su condición sea estable.
“La única forma de hacer diagnostico temprano de hepatitis cónica es identificar a los pacientes con factores de riesgo y estudiarlos en forma oportuna, antes de que tengan síntomas. Las enfermedades metabólicas como la diabetes o la alteración en los niveles de colesterol o triglicéridos en sangre, el sobrepeso, el consumo de alcohol de más de cinco bebidas diarias o la combinación de estas condiciones, representan un factor de riesgo para la aparición de inflamación crónica del hígado, y si los pacientes no se diagnostican en forma temprana, desarrollan cirrosis”, concluyó Rodríguez Montalvo.
Datos Duros
Los problemas de salud hepáticos se presentan en promedio entre los 30-60 años de edad, aunque con los índices de obesidad y sobre peso infantil se está empezado a encontrar casos de enfermedad grasa del hígado en niños y pubertos entre los 10-13 años de edad.
El hígado es un órgano silente, lo cual hace que las complicaciones y síntomas derivados de sus enfermedades lleguen a manifestarse hasta 20 años después, convirtiéndose en una situación de alto riesgo, delimitando su alternativas de tratamiento y teniendo al transplante como única opción.
Cuadros patológicos como: obesidad y sobrepeso, diabetes, hipertensión arterial, niveles sanguíneos elevado de triglicéridos (grasas), bajos niveles sanguíneos de HDL (colesterol bueno) provocan un síndrome metabólico, volviendo a un paciente más propenso a presentar enfermadas hepáticas.
Se considera que el promedio de ingesta de alcohol por semana o medida estándar sea de ocho latas de cerveza de 355 ml con un porcentaje volumétrico de alcohol entre 4.5% y 6%, esto quiere decir que cada lata posee una cantidad de alcohol puro de 16 a 21 ml, siendo 15.97 y 21.3 ml su equivalente a 8 latas. Sin embargo, también existen variaciones dependiendo el tipo de bebida alcohólica, (cerveza, vino, licor, cócteles y/o bebidas preparadas), el género y la tolerancia en respuesta al consumo.