Hace 27 años, al famoso guitarrista de The Rolling Stones. Keith Richards intentó apuñalar al ahora aspirante a candidato a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump.
La famosa banda de rock, decidió buscar a un inversionista con una chequera millonaria que financiara el presupuesto de su gira mundial Steel Wheels, para llevarlo a la modalidad pago por evento.
Según el manager de la agrupación británica, Michael Cohl, quien difundió la anécdota el inversionista termino siento el ahora polémico aspirante Trump.
Cohl, señaló que desde ese entonces los Stones le tenían cierta desconfianza al magnate multimillonario debido a su inexplicable y ascendente fortuna, sin embargo, aceptaron con ciertas restricciones como el prohibir la asistencia de Trump al concierto así como ofrecer ruedas de prensa juntos pero el terco empresario omitió las restricciones y anunció una conferencia de medios en la misma habitación de los Rolling Stones.
Ante esto, Cohl le solicitó en diversas ocasiones al magnate cancelar la rueda de prensa inmediatamente, pero este hizo caso omiso.
El manager de la mítica banda relató que Trump no desistía y colmó la paciencia de Richards, quien tomó su propio cuchillo y lo amenazó.
“¿Qué demonios tengo que hacer? Uno de nosotros debe abandonar el edificio” señalaba el enojado guitarrista.
Además el resto de la banda se vio obligado a llamar a su jefe de seguridad y armarse de armas para defenderse como palos de hockey y objetos, pues el magnate antes de abandonar el lugar mandó llamar a sus guardaespaldas.
Desde entonces, la banda ha evitado cualquier evento con Trump así como con cualquier marca de su imperio.