José Luis Marroquín/El Nacional
Tras presentar el Gobernador Jaime Rodríguez Calderón ante el Congreso, una reforma a la Ley Orgánica del Estado de la Administración Pública para restructurar el Gabinete de Gobierno, los diputados aprobaron con 37 votos a favor estas modificaciones.
Dicha reforma tiene el fin de desaparecer 54 subsecretarías del gobierno central y 21 organismos del gobierno paraestatal, además de eliminar la Subsecretaría de Administración y convertirla en Secretaría de Administración.
Asimismo fusionar la Secretaría de Desarrollo Económica y la de Trabajo para crear una sola, además de transformar la Secretaría de Obras Públicas en Secretaría de Infraestructura.
Esta aprobación se dio luego de que los legisladores le dieron su voto de confianza al Ejecutivo para poder iniciar esta operación, la cual tomará alrededor de un año para hacer dichos cambios.
El diputado del PRI, Héctor García habló en tribuna en representación de los diputados, en donde señaló que el Legislativo no puede ir en contra de una Ley Orgánica, la cual tienen la esperanza que beneficie a la ciudadanía.
“En esta Ley Orgánica quiero mencionar que nunca el Legislativo sea distinguido por ser estorbo y mucho menos cuando se intenta mejorar la calidad de un Gobierno y las políticas públicas que lleva ese Gobierno.
“Si bien es cierto tuvimos algunas discrepancias en el primer proyecto de iniciativa, finalmente logramos un acuerdo que satisface a todos primordialmente al Gobierno del Estado. Este legislativo no puede ir en contra de una Ley Orgánica, menos cuando la voluntad de este Legislativo es de que al Gobierno le vaya bien para que a Nuevo León le vaya bien”, declaró.
Agregó, “desde aquí le queremos reiterar al Gobernador que con el Congreso puede contar, con todas aquellas cosas que sean en beneficio de la gente y para la gente, damos el voto de confianza porque no había la total coincidencia en algunas circunstancias de esta Ley Orgánica”.
Cabe señalar que en entrevista Héctor García mencionó que dentro de esta aprobación existen candados, en los que cada modificación que haga el Ejecutivo tendrá que acercarse al Legislativo para llevarla acabo.
“Agregamos algo muy importante, que es que todas aquellas liquidaciones de fideicomiso, de concesiones, de modificaciones pasarán por el Congreso no como el documento original que se pretendía que desde hoy autorizáramos los cambios de reglas de operación, de leyes, no, cada uno de los pasos que den tendrán que pasar por este Congreso”, explicó.
Son alrededor de 16 cambios los que hicieron los legisladores al dictamen original que presentó el Gobernador, en donde hay alrededor de 12 o 13 leyes reglamentaria que deberá conocer primero el Congreso antes de que haya una modificación, esto con el fin de saber que cada paso que se dé, lleve un sustento jurídico.
