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Redacción/El Nacional

La industria del porno se ha encargado de vendernos el sexo anal como una práctica casi de obligación para el buen sexo. Pero, qué hay de cierto y de mito sobre el sexo anal?

Aquí te presentamos nueve mitos y verdades sobre esta práctica.

La penetración anal es igual que en la vagina. FALSO

La función principal del ano es excretora y su mucosa y musculatura no está preparada como la vagina para la penetración. Así que hay que tener en cuenta una serie de condiciones para tener penetración anal. El ano es una parte más del cuerpo humano, que de la misma manera que para mucha gente está destinada al olvido por su connotación escatológica, otra encuentra placer en su estimulación.

El sexo anal no es para todo el mundo. VERDADERO

Parece que para tener buenas relaciones sexuales, todo el mundo debe hacer de todo y practicar todo tipo de prácticas, pero no es así. El sexo anal es placentero para algunas personas, pero no tiene por qué serlo para todas. No debemos obligarnos a practicar aquello que no nos atrae o que nos produce rechazo. Esto atentaría contra el deseo y el placer sexual.

Todos los hombres quieren practicar sexo anal. FALSO

Es algo muy extendido pensar que el sexo anal es una práctica deseada por todos los hombres. Realmente no es así. Hay hombres a los que no les atrae, pero no debemos caer en estereotipos facilones.

Las mujeres acceden a tener sexo anal para complacer a sus parejas. FALSO

Este puede ser un motivo, desde luego. Hay muchas mujeres que encuentran satisfacción en el hecho de complacer. Pero tampoco se vale este estereotipo. Hay muchas mujeres que les gusta, desean y demandan sexo anal porque es placentero para ellas.

Los hombres a los que les gusta recibir sexo anal son homosexuales. FALSO

Esta creencia está muy extendida, pero realmente el ano es una parte erógena del hombre, a través de la cual se accede a lo que se llama Punto P. Es una parte muy placentera para los hombres. Si relacionamos el placer anal con la homosexualidad, y esto es para nosotros una connotación negativa, no podremos disfrutar libremente de la estimulación anal. De nuevo, la mente es el mayor potenciador del placer, y su vez, puede ser el mayor freno.

El sexo anal duele. FALSO

El sexo anal puede doler si no se hace bien, como ya se mencionó, el ano no está preparado para la penetración, como la vagina. Se debe preparar para la penetración. Debemos empezar por una estimulación con el dedo y luego progresivamente podremos utilizar algún dildo, o el pene. Siempre con mucha lubricación, porque el ano no lubrica como la vagina. Esta estimulación progresiva debe hacerse incluso en varias relaciones sexuales, y siempre dentro del juego erótico de la relación sexual.

El sexo anal debe ser consensuado. VERDADERO

El sexo anal debe ser algo pactado por la pareja. Jamás recurras al sexo anal a modo de sorpresa o sin avisar. Así puede hacerse mucho daño. Siempre debe ser algo que apetezca a los dos miembros de la pareja y que debe preparase.

Los preservativos para el sexo anal son distintos. VERDADERO

Si pretendemos realizar sexo anal, debemos tener preparados preservativos adecuados para ello. Los preservativos para el sexo anal son más resistentes, y algunos tienen extra de lubricación. Debemos usar un extra de lubricante. Sin olvidar siempre extremar las condiciones de limpieza.

Con el sexo anal no hay riesgo de embarazo. VERDADERO

Para los/as más despistados, efectivamente, con el sexo anal hay cero riesgo de embarazo, pero si hay riesgo de Enfermedades de Transmisión sexual. Así que siempre protégete en tus relaciones.