Redacción/@elnacionalred
Sextorsión, es una técnica utilizada por cobercriminales para obligar a sus víctimas a realizar actos sexuales o a depositar grandes cantidades de dinero a cambio de que no sean publicados conversaciones, imágenes o videos comprometedores en los que ha participado el agredido.
La nueva modalidad de extorsión utiliza una aplicación de Android para obtener información confidencial de las personas. En un principio, con el fin de obligar a la víctima a que mantuviera relaciones sexuales con el criminal, sin embargo, en 2008, el motivo principal del cibercrimen cambio, pues ahora se preocupan más por obtener un beneficio económico, informó Trend Micro, compañía global de software de seguridad.
En abril de 2014, la INTERPOL desmanteló una organización de 58 criminales dedicada a la sextorsión en Filipinas. Esta pandilla trabajaba creando perfiles de Facebook con fotos de mujeres muy atractivas para hacer que los hombres tuvieran una conversación por chat con ellas. El siguiente paso era llevar la conversación a una plataforma con video, como Skype.
“Lo que las personas no saben es que la conversación está siendo grabada sin su autorización y los videos serán utilizados para chantajearlas, forzándolas a realizar un pago de mil dólares a cambio de no publicar los videos que podrían dañar su reputación y si las víctimas se reúsan a pagar, los cibercriminales amenazan con publicar dicho contenido en YouTube”, comentó Juan Pablo Castro, Director de Innovación Tecnológica de Trend Micro México.
“Al simular problemas de audio durante el videochat, el cibercriminal induce a la víctima a descargar una aplicación móvil para solucionar el problema de audio, lo cual es solo un engaño para robarle los contactos de su teléfono” afirma Castro. Los atacantes amenazan con enviar las imágenes comprometedoras a toda su agenda.
Así, los delincuentes hacen uso de la tecnología y buscan cada vez más y mejores formas de engañar a los usuarios, motivo por el que es necesario
