Redacción/El Nacional
A través de sus redes sociales, la socialité Kim Kardashian, quién hace unos días dio a luz a su segundo hijo Saint West, expresó que desea ingerir su placenta con el objetivo de evitar la depresión posparto.
La también esposa del rapero Kanye West, recordó que esta será la segunda ocasión en que lo hará. La primera fue en 2013, tras dar a luz a su primogénita North West.
Kardashian confirmó a través de su página web y su cuenta de Twitter, esta decisión.
“Escuche muchas historias cuando estaba embarazada de North de mamás que nunca comieron la placenta de su primer bebé y luego tuvieron depresión posparto, pero después tomaron íldoras con su segundo hijo y no sintieron depresión, así que me pregunté: ¿Por qué no probarlo?, ¿Qué tengo que perder?, posteó.
Afirma que no encuentra nada peligroso en tomar algo que ella misma produjo. “No quería sentirme triste y pensé que no puede hacerme mal tomarme una pastilla hecha de mis propias hormonas, de mí para mí”.
