Redacción/El Nacional
La primera mujer en alcanzar la presidencia de Brasil, Dilma Rousseff, será sometida a un proceso de juicio político por adulteración de las cuentas públicas, lo que puede derribarla de su cargo.
Después de meses de rumores y amenazas, el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, quien es rival de Rousseff, aceptó un pedido de juicio político contra la gobernante de 67años.
Si 342 de los 513 diputados apoyan la consecución del proceso de juicio político, Rousseff sería apartada de su cargo. Después, necesitan 54 votos para que pierda su mandato y sea sustituida por su vicepresidente Michel Temer hasta las próximas elecciones presidenciales a celebrarse en 2018.
“Tengo la convicción y la absoluta tranquilidad en cuanto a la total improcedencia de ese pedido, así como de su justo archivo. No podemos dejar que conveniencias e intereses indefendibles debiliten la democracia y la estabilidad de nuestro país”, declaró la presidenta brasileña.
El procedimiento pasaría a una comisión especial que sería integrada con diputados de todos los partidos de manera proporcional pero, hasta el momento, no se ha definido una fecha para ello.