Redacción/El Nacional
Los alimentos procesados o enlatados, las botanas y embutidos contienen gran cantidad de sal para conservar el alimento, por lo que también se debe moderar su consumo.
La sal es útil para mantener la presión de la sangre y de los fluidos extracelulares, sin embargo, su consumo desmedido incrementa el riesgo de padecer hipertensión, enfermedades cardiovasculares, insuficiencia renal y obesidad.
El jefe de Medicina Interna del Hospital General Regional No. 36 “San Alejandro”, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Víctor Martínez Ahuejote, recomendó el uso medido de este químico.
Explicó que el cloruro de sodio, principal componente de la sal de mesa, es un electrolito indispensable para el funcionamiento de las células del cuerpo, pero su ingesta debe ser controlada para evitar enfermedades.
Martínez Ahuejote comentó que los pacientes con enfermedades del corazón, hígado o riñones, deben estar conscientes que la ingesta desmedida de sal complicará aún más su padecimiento.
La principal recomendación es llevar a cabo un consumo racionado de sal y en los niños evitar que se acostumbren a los alimentos salados siguiendo las recomendaciones de consumo diario de sal que es de dos gramos.
El especialista recordó a los derechohabientes acudir a los módulos de PrevenIMSS para recibir orientación sobre las cantidades idóneas de consumo en sal y azúcar de acuerdo con su talla, peso y estilo de vida.