Este lunes se reunieron el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, y el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, donde el primero destacó la solidez de los lazos bilaterales, después de asperezas entre las dos partes a raíz de un acuerdo internacional con Irán.
El presidente estadounidense dijo “que es un secreto a voces, que ambas naciones, mantienen desacuerdos, pero mencionó el “lazo extraordinario” entre los dos países; también aseguró que la seguridad de Israel permanece como prioridad absoluta en la política exterior de su gobierno.
Por su parte, el primer ministro israelí reafirmó el compromiso de su gobierno con el diálogo de paz con los palestinos y buscó disipar la impresión de que se opone a la creación de un estado palestino.
“Sigo comprometido con la visión de paz de dos estados para dos pueblos, un Estado palestino desmilitarizado que reconozca al Estado de Israel”, señaló Netanyahu.