Redacción/El Nacional
Un autobús que viajaba entre Katmandú y Chilime, al norte de Nepal, cayó aproximadamente 200 metros por un precipicio.
Debido a la escasez de combustible en el país, son muy pocos los vehículos que brindan servicio y aunque solo tienen capacidad para 35 pasajeros, transportan a muchas personas al mismo tiempo; algunos iban en el exterior y otros sobre el techo.
Algunas de las víctimas declararon que uno de los neumáticos se ponchó y eso provocó que el transporte se saliera de la carretera.
Este accidente dejó como saldo 30 decesos y 35 heridos.