Redacción/E Nacional
Hoy en día, el correo electrónico es universal y es más cómodo que otras vías de comunicación como el teléfono; además, nos permite pensar mejor lo que comunicamos y compartir diversos documentos sin importar mucho su tamaño.
Estas y muchas más razones lo hacen ideal para iniciar alianzas o hacer negocios; sin embargo, mucho de su éxito depende de qué tan bien esté redactado.
Por ello, hoy te presentamos algunas frases que debes evitar escribir en cada uno de tus correos, ya sea por su obviedad o por el sentido equivocado que puedan tomar. Así que toma nota.
- “ESPERO QUE ESTÉS BIEN”
La idea detrás de esta frase es expresar educación, pero en realidad se ve como una real preocupación de que tu potencial cliente vea con buenos ojos lo que estás a punto de proponer. A menos que seas en verdad amigo de esa persona, ese tipo de frases suenan falsas.
- “TE ESCRIBO PORQUE…”
Esta frase sólo es un cúmulo de palabras desperdiciadas y, además, es una obviedad, porque la otra persona ya sabe que estás escribiendo con algún propósito. En vez de eso, lo ideal es ir directamente al punto.
- “EN EL MUNDO DE HOY… / ACTUALMENTE…”
Frases como esta sólo evidencian que tratas de verte como un experto y que, además, el cliente necesita que lo pongas al día.
- “(NUESTRO PRODUCTO) REDUCE COSTOS E INCREMENTA LAS GANANCIAS / PERMITE / EMPODERA / FUE DISEÑADO PARA…”
¿En serio? Todos los creadores y personal de ventas hablarán bien de su producto porque todos los productos hacen las mismas promesas. ¿Acaso has escuchado a alguien que trata de vender algo y no hable bien de lo que intenta que compres? A menos que puedas demostrarlo con números o hechos, hablar de los beneficios es innecesario.
- “ME GUSTARÍA SABER SI ESTÁS INTERESADO”
En verdad, aunque suene feo, a los clientes no les importa lo que tú quieres. Este tipo de frases que priorizan tus deseos y necesidades dejan de lado lo que puedes hacer por el cliente; es decir, sus deseos y necesidades.
- “ESTOY SEGURO DE QUE TE ENCANTARÁ / DE QUE TE SENTIRÁS A GUSTO CON…”
¿En verdad? Con esto pueden interpretarse dos cosas: o estás exagerando o estás un poco loco. ¿Por qué? Sencillo. No puedes predecir el futuro y no puedes leer la mente del cliente antes de que siquiera haya decidido darle una oportunidad a tu oferta.
- “POR FAVOR NO DUDES EN LLAMARME A…”
Esta frase suena pretenciosa. Es como si dijeras que siempre estás muy ocupado, pero como se trata del cliente que sí quieres que te contacte, te tomarás la molestia de aceptar su llamada.
- “PARA MÁS INFORMACIÓN, VISITA NUESTRO SITIO”
Primero, tus clientes ya saben que hay más información en tu sitio, así que decirlo es obvio. Segundo, los clientes están en constante sobrecarga de información, por lo que tu mail debe ser capaz de dar la suficiente sin quitar tiempo y sin que se asemeje a la Biblia por su extensión. Sólo coloca la URL debajo de tu firma y si ellos quieren, le darán clic.
- “¿QUÉ TAL ESTÁ TU AGENDA LA SIGUIENTE SEMANA?”
Esto es inapropiado. Lo más que puedes esperar (al menos en un primer mail) es que el cliente responda tu correo, con el cual se pueda continuar la conversación y en la posibilidad de –ahora sí– reunirse y o tener una conversación telefónica.
- “ESPERO TU PRONTA RESPUESTA”
¿Qué? Para empezar suena como una orden; además elimina toda posibilidad de que el cliente te llame (si es que tiene la intención) porque, de cualquier modo, sabe que te urge y que tú le vas a hablar, así que ¿para qué molestarse?