Redacción/El Nacional
El ejercito del Estado Islámico destruyó con una explosión un lugar arqueológico llamado el Arco del Triunfo, el cual tenía casi 2 mil años de antigüedad en la ciudad de Palmira, Siria.
La zona arqueológica que fue destruida era una de las edificaciones más importantes del conjunto monumental y pertenecía a la UNESCO.
Irina Bokova, directora general de la UNESCO, condenó la destrucción del Arco del Triunfo y señaló que el ataque a ese enclave arqueológico demuestra que los yihadistas del Estado Islámico (EI) son la pura expresión del odio y la ignorancia.
“Esta nueva destrucción muestra hasta qué punto los extremistas están aterrorizados por la historia y la cultura, ya que el conocimiento del pasado resta credibilidad y deslegitima todos los pretextos utilizados para justificar esos crímenes”
“No habrá impunidad para los criminales de guerra y la UNESCO hará todo lo que éste en su mano para los actores de esa destrucción sean juzgados y castigadas, en estrecha colaboración con el Tribunal Penal Internacional, finalizó Bokova