Coral Rodríguez / El Nacional
Un estudio realizado por Psicólogos de las Universidades de Virginia y Utah, en EE,UU, han estudiado durante 14 años la evolución personal y el historial clínico de 171 personas , y aseguró que las personas que hacen buenas amistades y las conservan en la adolescencia, gozan de buena salud cuando se acercan a los treintas, ya que tienen experiencias emocionales más intensas.
Muchas de las veces, quienes forman un grupo de amistades, hacen que adopten puntos de vista de otros amigos aunque antepongan su punto de vista personal. Joseph P. Allen del Departamento de Psicología de la Universidad de Virginia asegura “Este tipo de interacciones sociales, en las que se anteponen los intereses de los amigos sobre los propios, redundan en una disminución del estrés vital”.
Este grupo de psicólogos estudiaron las relaciones de 171 adolescentes, desde los 13 a los 17 años , enfocándose en la conexión emocional que tenían entre sus mejores amigos. Una década más tarde, los científicos analizaron las posibles dolencias, hospitalizaciones, cuadros de depresión y ansiedad que esas mismas personas presentaban entre los 25 y 27 años de edad.
Es ahí donde llegaron a una conclusión, quienes mostraron mayor “conectividad”con sus amigos, se encontraban con una salud óptima, incluso cuando se tenían en cuenta otros factores como los ingresos, el índice de masa corporal, o el consumo de drogas.
En conclusión, los expertos le atribuyen la buena salud de los treintas a las buenas amistades forjadas en la adolescencia, ya que estas contribuyen a reducir los niveles de ansiedad y los síntomas depresivos incluso años después.
Así que comenzemos a forjarnos buenas relaciones personales, además de poder contar con buenos amigos que nos hacen disfrutar más la vida, de pasada nos ayudarán a poder gozar de buena salud en el futuro.