El Tribunal Federal alemán ha confirmado la condena de Irmgard Furchner, una mujer de 99 años, por su complicidad en asesinatos cometidos durante la Segunda Guerra Mundial. Furchner, quien trabajó como mecanógrafa en el campo de concentración nazi de Stutthof, fue condenada en 2022 a dos años de prisión en suspenso por su participación en el asesinato de 10,505 personas.

El tribunal rechazó el argumento presentado por el abogado de Furchner, quien sostenía que su cliente solo realizaba actividades “cotidianas” como mecanógrafa. Sin embargo, la corte determinó que su rol contribuía de manera significativa a las atrocidades cometidas en el campo. La decisión del Tribunal Federal es definitiva e inapelable, cerrando así uno de los últimos capítulos judiciales relacionados con los crímenes del Holocausto.

Una Prófuga Nonagenaria: La Huida de Furchner en 2021

En 2021, Furchner, entonces de 96 años, se convirtió en una de las prófugas más ancianas del mundo al no presentarse a la apertura de su juicio, lo que llevó a los jueces a emitir una orden de arresto en su contra. Su posterior captura y juicio subrayan los esfuerzos de las autoridades para llevar ante la justicia a quienes, aunque ancianos, fueron cómplices en uno de los episodios más oscuros de la historia.

Últimos Juicios del Holocausto: Una Carrera Contra el Tiempo

El caso de Furchner es parte de una serie de juicios recientes contra nonagenarios acusados de crímenes del Holocausto. Los fiscales han señalado que estos juicios representan una carrera contra el tiempo para garantizar que la justicia sea servida antes de que los últimos sobrevivientes y perpetradores de estos crímenes fallezcan.

Redacción/El Nacional