Residentes de Tenerife fueron obligados a desalojar sus viviendas ante los fuertes y altos vientos que favorecieron la extensión del incendio forestal que se registró a última hora del pasado martes en la zona turística de la isla española.

El enorme incendio ya ha sido declarado por las autoridades como el fuego más complejo que ha enfrentado el archipiélago canario en más de 40 años.

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Pedro Martínez, director de los trabajos de extinción, señaló que el incendio se encuentra fuera de la capacidad de extinción, no en todos los sectores, pero en gran parte de la zona afectada, informó también que los esfuerzos se vieron obstaculizados por el viento y las grandes nubes de humo en los últimos días.

El siniestro, tiene un perímetro de 50 kilómetros y ha destruido hasta ahora cinco mil hectáreas de terreno, con 225 bomberos trabajando durante la noche con el fin de controlar las llamas.