“Me reuní con mi comadre y me encargó algunas tareas” dijo ‘El Licenciado’ quien recordó durante el juicio contra Guzmán Loera, que uno de los planes era ingresar al penal del Altiplano un reloj con GPS para saber las coordenadas exactas de la celda del líder del Cártel de Sinaloa.

Los presentes en la sala 8D enseguida voltearon a ver a Emma Coronel quien permaneció sin mover un músculo. López Núñez, agregó que fueron al menos seis las reuniones con dicho propósito, celebradas entre marzo y julio del 2014, a las que acudieron los hijos de ‘El Chapo’: Iván, Alfredo y Ovidio y, por supuesto, el mismo Licenciado.

A decir de Dámaso, en cada una de esas reuniones, Emma Coronel repartía responsabilidades hasta que la fuga se concretó.

“A mí me pidió mi comadre que le consiguiera una bodega, armas y una pick up” retomó el Lic durante su presentación como testigo cooperante. En los primeros meses del 2015 me reuní con los hijos de mi compadre y me dijeron que ‘El Chapo’ les decía “ya escucho ruidos en mi estancia”, pero ni ellos ni yo lo creímos.

Redacción/El Nacional