CMD2OrAUYAAYfH_Redacción/El Nacional

El cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko y la sonda Rosetta, que acompaña al cometa en su viaje interplanetario, logró el día de hoy superar el objetivo: alcanzarán su punto más cercano al Sol, momento clave de la misión Rosetta, sembrado de misterio y eventuales sorpresas.

Rosetta llegó al cometa en agosto de 2014, después de un viaje de 10 años y seis mil millones de kilómetros, para acompañarlo durante por lo menos un año mientras rodea el Sol.

Este acontecimiento era esperado con ansias, pues la búsqueda molecular es un objetivo insaciable debido a que los cometas sufren un cambio muy drástico al acercarse a esa estrella, el Sol.

Los astrofísicos que siguen a fondo este viaje tan importante explican que la actividad generada en el núcleo es capaz de expulsar al espacio no sólo gas y polvo, sino grandes fragmentos, de hasta metros de tamaño que se desprenden del cometa.