Romell Broom, condenado a la pena de muerte tras violar y asesinar a una niña de 14 años en Cleveland, a finales de 1984, falleció por coronavirus el pasado lunes.

Lo que llamó la atención de este caso es que Broom soportó la inyección letal, misma que le fue aplicada el 15 de septiembre de 2009 sin que le provocara la muerte.

Este hombre se volvió famoso tras difundirse la impactante noticia de librar la pena capital en ese año. No obstante, las autoridades volvieron a aplicarle juicio y nuevamente lo condenaron a morir recibiendo la inyección letal.

En ese año medios estadunidenses reportaron que Romell fue pinchado en 18 ocasiones, pero al parecer, los aplicadores no pudieron encontrar la vena indicada para que le provocara la muerte.

De hecho, algunas versiones indican que el mismo condenado intentaba ayudarlos para encontrar el lugar indicado, sin tener resultados.

Fue así como se salvó de morir, desatando una polémica sobre si tenía que ser nuevamente enjuiciado para que sus crímenes no quedaran impunes.

Luego de un largo proceso por segunda ocasión fue condenado a la pena de muerte, fijada para marzo de 2022.

Solamente tres personas han logrado sobrevivir a la pena de muerte en Estados Unidos.

Al final fue el coronavirus el que terminó con la vida del hombre de 64 años.

Redacción/El Nacional