Al menos 11 de los 15 gobernadores que dejarán su cargo en 2021 incrementaron la deuda pública de su estado, como Nuevo León, Sonora y Nayarit, que lideran con aumentos mayores a 20 por ciento.
De acuerdo con cifras de la Secretaría de Hacienda, a este top 3 le siguen Colima, con un incremento de 18.1 por ciento en su deuda; Baja California, con 14.6 por ciento, y San Luis Potosí, con 10.3 por ciento.
En contraparte, tres gobernadores lograron reducir la deuda estatal pública, siendo el caso más llamativo el de Querétaro, donde el panista Francisco Domínguez registró un descenso de 79.5 por ciento en los saldos y actualmente la entidad solo debe 300 millones de pesos a instituciones financieras.
Las otras dos demarcaciones que disminuyeron sus obligaciones son Sinaloa, con 8.9 por ciento, y Baja California Sur, con un significativo 1.3 por ciento.