Hasta el año 2020, no hay fuerza más destructiva en el planeta empleada por el hombre, que las armas nucleares. Una de las personas que tiene un franco acceso a dicho arsenal de manera casi inmediata es el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Para que el mandatario autorice un ataque nuclear, necesita usar “los códigos de oro”, unos dispositivos similares a un token de autenticación que se actualiza de manera permanente. Además, algunos de los números deben ser memorizados y otros van en una tarjeta.

Los protocolos para lanzar un ataque nuclear se encuentran en un maletín reforzado con metal que acompaña a todas partes al presidente de Estados Unidos en el caso de que necesitara lanzar un ataque lejos de la Casa Blanca.

El maletín en cuestión es llamado “caja negra” o “pelota nuclear”, debido a su suma trascendencia, y por su apelativo que viene de la jugada de fútbol americano “Drop Kick”, nombre con el que fue bautizado uno de los primeros planes de ataque nuclear de Estados Unidos.

Junto a los códigos nucleares, dentro del maletín se encuentran de igual manera dos libros, uno de ellos contiene una explicación sobre los tipos de ataque nuclear que se pueden realizar y otro un listado de lugares para resguardar al presidente.

El maletín lo llevan militares que acompañan al presidente donde quiera que vaya.

La “caja negra” está casi todo el tiempo a no más de tres metros de distancia del presidente.

El encargado de resguardar el maletín es parte del primer anillo de seguridad del mandatario, que, además, lleva el maletín atado a su muñeca.

Redacción/El Nacional