Redacción /El Nacional
El británico Adrian Lane, un radioaficionado de Gloustercershire, llevaba un mes intentando establecer contacto con el centro de investigación tripulado que orbita la Tierra.
Lo que logró no es tan fácil como llamar por teléfono o escribir un mensaje de texto a un amigo.
Quien desee establecer contacto desde un punto fijo de la Tierra tendrá sólo entre uno y 10 minutos para hacerlo, un tiempo que varía de acuerdo a la elevación máxima que alcance la nave sobre el horizonte visible.
Lane escuchó “te recibimos” al final de una “ventana de contacto” de cuatro minutos, como llaman los radio aficionados al margen en el que es posible hacer contacto.
Les pregunto cómo se ven las estrellas desde allí arriba y me respondieron que, al no haber atmósfera, son realmente brillantes.