El gobierno francés señaló que movilizará a agentes de policía y a gendarmes para hacer cumplir el uso del cubrebocas en los espacios públicos donde sea obligatorio.

“Movilizaremos a fuerzas de policía y de la gendarmería para controlar mejor. Se tiene que ser claro: hay que temer menos al gendarme que te va a multar que al virus“, indicó el portavoz gubernamental, Gabriel Attal.

El representante del Ejecutivo no precisó el despliegue previsto pero subrayó que Francia se encuentra en un momento de inflexión, en el que se ha pasado de identificar cinco nuevos focos de coronavirus de media al día hace tres semanas a unos 25 actualmente.

“Las cifras son preocupantes. Es necesaria una vigilancia absoluta de parte de todos los franceses”, recalcó.

El primer ministro francés, Jean Castex, anunció que, ante la evolución de la epidemia, encargará a los prefectos (delegados de Gobierno) que se coordinen con los ayuntamientos para “ampliar lo máximo posible la obligación de llevar mascarilla en los espacios públicos”.

Asimismo, prolongó hasta el 30 de octubre la prohibición de organizar acontecimientos con más de 5 mil personas, un veto que en principio iba a expirar el 1 de septiembre y que los prefectos podrán levantar de forma excepcional.

Redacción/El Nacional