De acuerdo con datos recopilados por The Associated Press y Marshall Project, una organización sin fines de lucro que se enfoca en la justicia penal, a finales de junio se habían registrado por lo menos 52 mil 649 casos confirmados de COVID-19 entre los reclusos, un incremento del 8% respecto a la semana anterior.
Los brotes recientes amenazan con deshacer las medidas de control implementadas al inicio de la pandemia del coronavirus.
Entre los casos, por lo menos 35 mil 796 reclusos se han recuperado y al menos 616 han perdido la vida, según los datos. Además, se han registrado más de 11 mil 180 casos de COVID-19 entre el personal de las prisiones, incluidas 43 muertes.
Para el 30 de junio, sólo Wyoming y Hawai no habían identificado algún caso de COVID-19 entre los reclusos.
La Agencia Federal de Prisiones informó que la mayor cantidad de reclusos muertos fue de 94. Ohio reportó la mayor cantidad de decesos, con 86 registrados hasta finales de junio. Más de 5 mil reclusos en cárceles federales han dado positivo.