Ana Hernández/El Nacional

El escritor colombiano prepara su discurso para el momento de hacerle entrega del tan merecido premio en Caracas. Montoya hace de “la labor del artista” el tema principal para su discurso pues el conceptualiza al arte como la manera de dignificar al ser humano con respecto a la capacidad de su resistencia pero al mismo tiempo de su deterioro.

En su novela, los tres pintores protagonistas de la historia a pesar de no ser tan conocidos, muestran lo más importante de sus vidas y trayectorias, paisajes que nos llevan a épocas del pasado a las que nunca hemos imaginado llegar.

Tríptico de la infamia es una obra interesante que goza de amplio reconocimiento en los círculos literarios, novela que aporta una mirada novedosa sobre la historia en uno de sus momentos más difíciles y sangrientos, además de ser una reflexión muy actual sobre el encuentro entre el fanatismo y la violencia así como la búsqueda de la humanidad, la belleza y la cordura.

Cabe mencionar que es también un recorrido vívido por el mundo del arte de la mano de un maestro en la materia, Pablo Montoya ha incursionado en el fabuloso mundo de la literatura de una manera extraordinaria que nos lleva a volar nuestra mente e imaginación a muchos paisajes de la historia así como de la fantasía, en esta ocasión Montoya consigue el premio reconociéndolo “Tríptico de la infamia”.

De esta manera, en su obra Montoya hace un recorrido por los principales acontecimientos del siglo XVI, desde la mirada particular de tres pintores que fueron testigos de la infamia de las persecuciones religiosas y del despojo, y a la vez de la belleza del Nuevo Mundo que se acababa de descubrir.