Agencias / El Nacional
El ex presidente de Yemen, Ali Abdullah Saleh, pidió juzgar a su sucesor en el exilio, Abdo Rabbu Mansur Hadi, por “alta traición” y promover la ofensiva aérea lanzada por Arabia Saudita en suelo yemenita para frenar el avance de los rebeldes houthi.
Hadi, refugiado en Arabia Saudita desde marzo pasado después de huir de Yemen en pleno avance houthi, ha abandonado sus responsabilidades y ha organizado la agresión contra su pueblo y su patria, aseguró Saleh, aliado de la insurgencia houthi.
“Ahora es un enemigo de todos los yemenitas”, denunció en una entrevista a la edición en árabe del portal The Huffington Post. Arabia Saudita y otros aliados de la región lanzaron a finales de febrero pasado una ofensiva militar con la que intentan frenar a los rebeldes y a las fuerzas leales al ex presidente yemenita.
Los ataques aéreos de la coalición, liderada por Arabia Saudita, son un error, porque el reino, antiguo aliado de Yemen, se considera ahora por los yemenitas como un agresor. “El huido Hadi cometió alta traición cuando pidió la intervención extranjera.
Debe ser juzgado, llevado ante el Tribunal Penal Internacional (TPI) por los crímenes que ha cometido”, dijo Saleh. Además, Saleh acusó al actual gobierno saudita de “dar asilo a elementos criminales” como los que cometieron un atentado que mató, en 2012, a algunos de sus principales asesores, por lo que Arabia Saudita “ya no es un país hermano o amigo, sino un agresor”.
En el marco de su lucha contra los rebeldes, las fuerzas leales a Hadi recuperaron el control de la base militar de Al Anad, la mayor del país, tras intensos combates con la insurgencia houthi, según fuentes castrenses.
El comandante de la operación, general de brigada Fadel Hasán, confirmó la muerte o detención de decenas de rebeldes, además señaló que buscan a cientos que podrían haber huido tras el asalto a la base, situada al norte de la ciudad de Adén.
NTX