Diversas organizaciones civiles ven a Monterrey como una posible “ciudad santuario” para los migrantes que se dirigen a Estados Unidos, debido a su capacidad económica y oportunidades en el mercado laboral.

Actualmente, en la entidad existen cuatro organismos que fungen como centros de ayuda para refugiados o en condiciones de vulnerabilidad, como Casa Nicolás, Casa Santa Martha, Casa INDI y Casa Monarca, esta última, impulsando acciones para integrar a estas personas en la sociedad económicamente activa del estado.

De acuerdo con el sacerdote y presidente de Casa Monarca, con sede en Santa Catarina, Luis Eduardo Zavala, actualmente el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), acoge migrantes para que “puedan integrarse en trabajos que ofrecen las empresas”, principalmente como operarios o ayudantes generales.

Agregó que los migrantes “de paso” avecindados en Nuevo León, “representan cerca del 0.5 por ciento” de la población de la entidad (5.12 millones de habitantes), indicio de que comienza a convertirse en una metrópoli “santuario”.

Zavala aseguró que su organización colabora con las autoridades estatales y el ACNUR para que los migrantes reciben una Clave Única de Registro de Población y puedan instalarse en centros de trabajo.

El 19 de febrero pasado, ACNUR informó que de las más 70 mil solicitudes de refugio para migrantes recibidas en México durante el año 2019, un total de dos mil 500 fueron aceptadas en el estado de Nuevo León.

Redacción/ El Nacional