Un grupo de policías arrestó a un chico de 16 años con epilepsia y autismo después de que éste sufriera un ataque en el baño de un restaurante de comida rápida de Fresno en California (EE.UU.).
En la grabación se observa cómo uno de los agentes agarra contra su voluntad al joven mientras sus familiares le dicen que está enfermo. Asimismo, se ve cómo los policías mantienen al chico esposado de rodillas en plena calle ante la desesperación de sus parientes, que no dan crédito a lo que están viendo.
La madre del joven, Lourdes Ponce, asegura que su hijo acababa de salir del médico tras sufrir ataques epilépticos, cuando experimentó nuevas convulsiones en el baño de dicho local, momento en que pidió ayuda y llamó al 911. “Llamamos a los paramédicos en busca de ayuda, no a la Policía. No estaba hiriendo a nadie, estaba teniendo una convulsión”, indicó Ponce.
Sin embargo, la Policía se presentó en el restaurante de comida rápida y esposó al joven. Según la madre, el chico fue presa del pánico y empezó a vomitar, mientras los policías no hacían nada para evitar que se ahogara con su propio vómito. En ese momento, ella le enseñó a los agentes documentos que demostraban que su hijo tiene epilepsia y lo pudieron llevar al hospital.
Ponce detalló que su hijo, que todavía se está recuperando, se encuentra muy traumatizado por la experiencia. Además, reveló que la Policía, que ya ha abierto una investigación sobre el caso, les comunicó que el chico no será arrestado en relación con el incidente.