El Comando Central de Estados Unidos informó que tras el ataque iraquí a la base militar de Al Asad, 11 elementos estadounidenses sufrieron conmoción cerebral.

De acuerdo a la información, Bill Urban, portavoz del Comando Central indicó que los militares estadounidenses fueron tratados por síntomas de conmoción cerebral por la explosión y que los siguen evaluando.

Como procedimiento estándar, todo el personal en las proximidades de una explosión se somete a un examen de traumatismo craneoencefálico y, si se considera apropiado, se transporta a un nivel superior de atención.

Cuando se considere apto para el servicio, se espera que los miembros del servicio regresen a Irak después de la evaluación. La salud y el bienestar de nuestro personal es una prioridad“, comentó Urban.

Redacción/El Nacional