El papa emérito Benedicto XVI exhortó públicamente a su sucesor Francisco a abandonar la idea de ordenar sacerdotes a hombres casados, una iniciativa muy inusual en el Vaticano.

Francisco debe tomar una decisión sobre este tema en las próximas semanas.

Ante la falta local de sacerdotes en la Amazonia que faciliten el acceso a los sacramentos, un sínodo sugirió ordenar sacerdotes a hombres casados de cierta edad preferiblemente indígenas.

Benedicto XVI, de 92 años, expresó su opinión en un libro escrito con el cardenal ultraconservador Robert Sarah, cuyos fragmentos fueron publicados en exclusiva por el diario francés Le Figaro.

La similitud de nuestras preocupaciones y la convergencia de nuestras conclusiones nos han llevado a poner el fruto de nuestro trabajo y de nuestra amistad espiritual a disposición de todos los fieles como hizo san Agustín. En efecto, como él podemos afirmar: “¡Silere non possum! ¡No me puedo callar! “, escriben los dos eclesiásticos.

Es urgente, necesario, que todos, obispos, sacerdotes y laicos, recuperen una mirada de fe sobre la iglesia y sobre el celibato sacerdotal que protege su misterio”, afirman.

Piden a toda la Iglesia que no se “deje impresionar” por “los malos alegatos, las puestas en escena teatrales, las mentiras malvadas, los errores de moda que quieren desvalorizar el celibato sacerdotal”.

Redacción/El Nacional