El huracánLorenzo golpeó el miércoles las islas Azores con lluvias intensas, vendavales y grandes olas que causaron daños importantes en el principal puerto del archipiélago, informaron las autoridades. No es habitual que un huracán del tamaño de Lorenzo llegue tan al norte y al este de la cuenca atlántica.
Lorenzo produjo grandes subidas del nivel del mar en el Atlántico Norte, en su ruta hacia Irlanda y Gran Bretaña. Se esperaba que perdiera fuerza hasta convertirse en un huracán de categoría 1.
El huracán de categoría 2 derribó árboles y tendidos eléctricos a su paso al oeste del archipiélago portugués, según la Agencia de Protección Civil local.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados unidos, con sede en Miami, informó que las crecidas provocadas por Lorenzo se sentían en las costas orientales de Estados Unidos y Canadá, en las Bahamas y en partes del occidente de Europa. Esas crecidas provocaban peligrosas marejadas y corrientes.
Es “probable que sea un ciclón bastante enérgico” cuando llegue a Irlanda el jueves por la noche, añadió el centro estadounidense.
Por su parte, la Oficina Meteorológica Británica advirtió de “vientos muy fuertes y lluvias intensas” en la zona occidental del país el jueves y el viernes.
La agencia meteorológica portuguesa dijo que las islas más afectadas en el archipiélago eran Flores y Corvo, donde las estaciones climáticas reportaban ráfagas de hasta 163 km/h (101 mph), menor a lo pronosticado porque Lorenzo perdió potencia sobre las aguas frías del Atlántico.
El primer ministro de Portugal, Antonio Costa, habló con las autoridades de Azores al amanecer y dijo que el momento de mayor peligro por el huracán había pasado sin grandes daños.
“Por suerte, todo indica que las cosas no han salido tan mal como temíamos”, dijo Costa a la prensa en Lisboa.
Dos viviendas fueron evacuadas sin incidentes y no se habían reportado heridos, afirmó Carlos Neves, responsable de Protección Civil.
Unas 250.000 personas viven en las nueve islas volcánicas. Es un popular destino turístico, famoso por sus lagos, montañas y cráteres volcánicos.
Las autoridades del archipiélago pusieron siete islas en alerta roja ante la llegada de Lorenzo. Se suspendieron las clases y las oficinas del gobierno cerraron, entre recomendaciones a la gente de que se mantuviera a cubierto el miércoles.
La aerolínea de Azores SATA canceló todos sus vuelos al archipiélago y algunas islas cerraron sus puertos.