Luego del conflicto por el aumento a las tarifas del transporte público de Nuevo León, el cual ya cumplió un año, todavía no existe una solución o un plan definido por las autoridades transportistas.
Fue el pasado 17 de septiembre del 2018 cuando el Consejo Estatal de Transporte y Vialidad (CETyV) aprobó el aumento a las tarifas de las rutas urbanas, por petición de los empresarios transportistas que alegaban una crisis financiera.
El acuerdo nunca fue publicado en el Periódico Oficial del Estado, el cual no entró en vigor debido a la presión ciudadana, ademas el CETyV sesionó nuevamente el pasado mes de mayo y negó el aumento.
Hasta el momento la pugna ha persistido entre los empresarios, el gobierno del estado, los organismos civiles, diputados y demás integrantes del Consejo, no han podido llegar a un acuerdo en el tema.
El pasado 9 de mayo, el Gobierno de Jaime Rodríguez Calderón solicitó un financiamiento por 4 mil 910 millones de pasos al Congreso del Estado para poder adquirir 2 mil 500 camiones y obtener el control del transporte público, pero la propuesta fue rechazada.
Posteriormente, el 26 de mayo, el Estado publicó en su Periódico Oficial, las Reglas Particulares de Operación del Sistema de Prepago (tarjeta Feria), donde establecía la creación de un fideicomiso para concentrar todos los recursos.
Los nuevos conflictos que se han presentado por la regulación de las aplicaciones de transporte tipo Uber, DiDi, Cabify, entre otras, ya que recientemente el gobierno estatal anunció la creación de un impuesto del 1.5 por ciento para que puedan circular, pero diputados locales señalaron que sería ilegal.
Cabe mencionar que el Congreso local aún tiene pendiente la publicación de la nueva Ley de Movilidad.
Redacción/El Nacional