Después de que los chóferes de Uber, DiDi y otras aplicaciones lograron detener las operaciones del Estado en su contra, alrededor de 500 chóferes de taxistas protestaron en el Congreso local para pedir regularización de los vehículos por aplicación.
Los conductores se manifestaron hasta la calle Matamoros, en el centro de Monterrey, en donde llegaron en sus vehículos escoltados por agentes de tránsito.
Los elementos de tránsito impidieron que los manifestantes dejaran sus vehículos sobre la avenida Zaragoza.
Los taxistas se retiraron de lugar cuando Julia Espinosa, presidenta de la Comisión de Transporte, salió a dialogar con ellos y les explicó que en la Ley de Movilidad que se aprobará en septiembre estará ya regularizado el servicio de transporte privado el cual pagará derechos y obligaciones como los taxis de concesión.