Los alpinistas David Lama, Hansjörg Auer y Jess Roskelly fueron dados por muertos tras desaparecer en Canadá a consecuencia de una avalancha en las Montañas Rocosas cuando subían Howse Peak, un pico de 3.295 metros especialmente sensible al riesgo.
Las autoridades canadienses han informado de que en estos momentos están trabajando en la zona, pero “debido a nuevas avalanchas y las peligrosas condiciones en la zona” no han podido aún proceder a la recuperación de los restos.
El organismo público al frente del Parque Nacional de Banff, Parks Canadá, Paks Canadá, informo a la agencia EFE de que “basado en la valoración de la situación, se presume que los tres miembros del grupo han muerto”. Estas declaraciones tienen fueron después de que desde este miércoles no se volvieran a recibir noticias de los alpinistas, considerados tres de los mejores alpinistas del mundo.
En un comunicado, Parks Canada expresó “sus más sinceras condolencias a las familias, amigos y seres queridos de los tres montañeros”.
Por su parte, el periódico estadounidense The Spokesman Review señaló que Roskelley, de 36 años, dijo a su padre que contactaría con él el martes, sin embargo, esa conversación nunca se produjo.
John Roskelley, padre del alpinista, se puso en contacto con las autoridades canadienses que sobrevolaron el área en helicóptero e informaron de que había indicios de una avalancha y, al menos, un cuerpo parcialmente enterrado. Fue el mismo Roskelley el que afirmó al citado medio de que su hijo y los montañeros austriacos habían fallecido y no desaparecido.
