Es común que olvidemos ciertas partes de nuestro cuerpo dentro de nuestra rutina de cuidados, entre ellas las axilas, las cuales son muy importantes y aunque no lo creas, cumplen una función muy importante. ¡Cuídalas!
Aunque parezca increíble, esta zona a la que le prestamos atención solamente para depilar o ponerle desodorante después de bañarnos, puede darte señales claras de estar padeciendo algunas enfermedades o desbalances hormonales.
Primero lo primero.
La axila o sobaco se encuentra ubicado bajo la unión entre el hombro y el brazo, esta zona es propensa al crecimiento de vello tanto en hombres como mujeres, culturalmente es mal visto que las mujeres dejen crecer la vellosidad de esta área, por lo que la mayoría de las mujeres optan por eliminar, las axilas están propensas a la sudoración, por lo que es común utilizar diferentes métodos para desodorizar la zona.
Indicadoras de serios trastornos
Picazón
La picazón en esta área puede ser por distintos factores, una de las razones es porque la piel en este lugar es muy delicada y puede irritarse por el uso de algunos productos que tengan ingredientes agresivos como el desodorante o hasta el mismo jabón para ropa, también la picazón puede indicar la presencia de hongos, por lo que te recomendamos suspender el uso de los productos en esta zona y consultar inmediatamente al médico.
Mal olor
Las axilas sudan de manera natural expidiendo un aroma característico, sin embargo si el olor es extremadamente fuerte puede ser un indicador de algún desbalance, como problemas con la tiroides.
Cuando el olor es parecido al acetona o fruta podrida, es recomendable ir inmediatamente a verificarse, ya que puede ser indicio de padecer cetoacidosis,estado metabólico que se asocia a una elevación en la concentración de los cuerpos cetónicos en la sangre, el mal olor estaría indicando que el cuerpo no está rompiendo el azúcar de manera adecuada o principios de diabetes.
Bultos
Si al tocar las axilas notas pequeñas protuberancias, no entres en desesperación, hay que tomar en cuenta que en esta zona se encuentran los ganglios linfáticos, por lo que una inflamación en ellos, podría indicar que el cuerpo está combatiendo un virus o que estás a punto de enfermar.
Sudor en exceso
Aunque la sudoración es normal en esta zona, hay que estar alerta cuando esta es excesiva, ya que esto podría indicar hiperhidrosis, enfermedad que se caracteriza por una excesiva producción de sudor de manera crónica en una o varias partes del cuerpo.