Una niña de 12 años resultó embarazada tras ser violada por un vecino de 60 años, en la provincia de Jujuy, desatando una polémica en el país argentino debido a que los padres de la víctima solicitaban que se le practicara una interrupción legal del embarazo.
Fue el pasado 11 de enero, cuando la menor presentó malestares en su abdomen, razón por la que sus padres la llevaron a un centro médico jujeño, donde descubrieron que tenía 23 semanas de gestación.
La víctima señaló que había sido violada por un vecino de 60 años y que decidió ocultarlo debido a que se encontraba bajo amenazas de su agresor.
“Mi hija me contó que un día estaba jugando afuera y el vecino le pidió ayuda para meter una mesa a su casa. Ella fue y el hombre la agarró, le tapó la boca y la metió para adentro.Abusó de ella y la amenazó que iba a matarla a ella y a toda la familia si le contaba a alguien”, reveló la madre de la menor.
En Jujuy, Argentina, el aborto puede realizarse hasta la semana 22, pero la niña se encontraba en la semana 23.5, por lo que encontraron un vacío legal que decidieron arreglar interrumpiendo el embarazo por medio de cesárea.
Lo anterior con el fin de salvar la vida de la niña que tenía un embarazo de alta riesgo por su edad, así como también la vida del bebé.
Fue el viernes cuando se practicó la cesárea a la menor logrando el nacimiento de una niña, la cual se encuentra en cuidados neonatales donde terminará de formar sus pulmones, y posteriormente será dada en adopción.