Redacción/El Nacional
El Coordinador de los regidores del PRI Eugenio Montiel Amoroso lamentó el asunto de la vinculación de una escolta de Margarita Arrellanes con la delincuencia organizada, la cual recalcó que es una nítida radiografía de lo que está sucediendo en el municipio de Monterrey.
Montiel Amoroso mencionó que los regidores del PRI han señalado durante los 26 meses de gestión la falta de seriedad y experiencia para conducir el tema como se debe, el cual han sostenido que debe estar alejado de protagonismos y estridencias políticas y si con estrecha vinculación con los otros niveles de gobierno.
“Consideramos que si lo más cercano e íntimo a ella y su familia como lo es la escolta no tuvo la capacidad de detectar, de percibir, de darse cuenta que algo andaba mal, pues que nos espera a los ciudadanos de a pie, que estamos a expensas de las decisiones de nuestros gobernantes, lo que lleva a asegurar la errática toma de decisiones e incluso con alto grado de irresponsabilidad ya que nos sometió a todos los que trabajamos en el Municipio de Monterrey a un alto riesgo”, dijo el regidor priista.
“Ante esta terrible omisión nos confirma una vez más que Margarita Arellanes se dedicó a simular en el tema de la seguridad durante su tiempo como Alcaldesa y basta recordar la denuncia del rector de la UCS (Universidad de Ciencias de la Seguridad), quien a principio del 2014 mencionó la falta de certificación de los policías municipales, que estaban siendo reclutados ahora bien, también hay que decirlo que Arellanes está pagando su incumplimiento en las promesas de campaña en seguridad, pues ella aseguró dadas las evidentes muestras de lo corrompida que se encontraba la antigua policía regia, y haría borrón y cuenta nueva a la corporación y al no cumplirlo pues facilitó que se infiltraran en su círculo íntimo este tipo de personajes”
El priista, reiteró que la responsabilidad de asegurar la confiabilidad de cualquier escolta corresponde al alcalde y mencionó que fue un aspecto que la alcaldesa con licencia Margarita Arellanes dejo a un lado.