Entre un fuerte dispositivo de seguridad, cientos de neonazis marcharon este fin de semana en la ciudad de Köthen, Alemania para exigir a las autoridades justicia por la muerte de un ciudadano alemán, presuntamente a manos de dos refugiados afganos.
Los manifestantes marcharon portando banderas alemanas y expresando su apoyo hacia los correligionarios de Chemnitz.
La marcha tuvo origen al darse a conocer la muerte de un joven de 22 años, que falleció de un infarto tras intentar impedir una pelea entre dos afganos.
Lo que terminó por enardecer los ánimos de los manifestantes fue el segundo caso en el que falleció un hombre de 35 años, en circunstancias aún desconocidas, después de una pelea al término de una fiesta popular.
La muerte de los dos jóvenes dio pie a que se movilizaran las organizaciones de ultraderecha como la parlamentaria Alternativa para Alemania como el movimiento islamófobo Pegida, quienes han sacado a la calle a sus seguidores para arremeter contra la política de asilo que instauro la canciller alemana, Angela Merkel.
Ante las exhibiciones de los manifestantes en los que realizan el llamado ‘saludo hitleriano’ en Chemnitz, ya se conoce las primeras condenas, una de ellas de cinco meses de cárcel y la otra de ocho meses de libertad condicional.
