Nuevo León es uno de los cinco estados del país que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ubicó en alerta amarilla, ésto debido a su nivel de endeudamiento.
El informe pone el primer lugar al estado de Coahuila con un balance de 194.7%, seguido de Chihuahua con 171.1%, Quintana Roo con 145.8% en el tercer lugar, mientras Nuevo León se instala en cuarta posición y Sonora en quinto con 114.2%, respectivamente.
Este sistema de alertas fue puesto en funcionamiento en junio2017, para determinar el techo de financiamiento neto al que podrán acceder en el próximo ejercicio fiscal.
Ademas determinará el uso que podrán dar los estados a sus ingresos excedentes, es decir, si el nivel de endeudamiento está bajo observaciones o elevados, se enfrentará mayores restricciones para destinar sus recursos.
El Tesorero Carlos Garza Ibarra, admitió que la situación financiera del estado sigue siendo un reto complejo, presumió la reestructuración de la deuda estatal, la cual ha aumentado en la administración de Jaime Rodríguez.
Garza Ibarra explica que al reestructurar la deuda del estado se ahorró $3,933 millones de pesos, sin embargo el Estado está obligado a seguir contratando financiamientos.
“Estamos atados a tener que seguir contratando financiamiento, en la medida que podamos dar vuelta al déficit que tenemos, vamos a tener espacio para no pedir financiamiento y poder invertir con nuestros propios recursos”, señaló.
Aunque la deuda estatal va en aumento, el tesorero aseguró que no se tiene planeado aumentar o crear nuevos impuestos, sino mantener un “estricto control de gastos”.
“Está muy claro que la situación financiera del estado no nos permite operar, los legisladores perfectamente saben que el financiamiento es algo sumamente estratégico y vital para la operación del estado”, aseveró.