Especialistas mexicanos investigan el impacto a largo plazo de la “nube tóxica” que provocó la fumigación de un campo de chile habanero y que en un primer efecto, provocó la muerte de al menos 15 millones de abejas, poniendo en riesgo la cosecha de miel para el próximo año de apicultores del ejido La Candelaria, en el municipio de José María Morelos.
La nube tóxica que dejó el uso de fipronil, un químico comercializado bajo la marca Regenet 4SC, y que sería el que se usó para fumigar el plantío de chile habanero en el ejido de La Candelaría en José María Morelos, podría dejar efectos a largo plazo afectando otras especies de insectos como mariposas, arañas, abejas silvestres y hasta murciélagos, que son especies polinizadoras de la selva maya.
Los primeros reportes por la muerte masiva de abejas se hicieron el miércoles 8 de agosto ante el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible (CCMSS), península de Yucatán, que se ha dado a la tarea de recorrer cada uno de los plantíos afectados de manera directa y los que a casi dos semanas de la fumigación siguen presentando problemas, a pesar de que están más alejados de la zona afectada.
El ejido La Candelaria se ubica dentro del municipio José María Morelos y hasta el momento hay 18 campesinos afectados de manera directa, están a la espera del veredicto de las autoridades agrarias y de los resultados de los análisis practicados para poder saber los pasos a seguir.
Por ahora el panorama es incierto y desolador pues todo apunta a que las colmenas afectadas están contaminadas y no podrán ser usadas nuevamente. Deberán ser incineradas para evitar cualquier tipo de afectación a futuro.