Autoridades estadounidenses comenzaron una investigación en contra de un matrimonio, luego que una mujer llevara a su hijo casi recién nacido al hospital con una severa fractura de cráneo y asegurara que un fantasma había dejado así al pequeño.

Los hechos ocurrieron el pasado 23 de febrero, en Texas Estados Unidos; en primera instancia la pareja explicó que el menor se había caído cuando el padre intentaba alcanzar un paquete de pañales.

Sin embargo la versión cambió cuando una cuidadora afirmó que la mujer de nombre María Benavides Ruiz de 21 años, había dicho que a mitad de la noche encontraron a su hijo llorando y herido y que un fantasma era responsable de esta situación.

Ante esta declaración, el 21 de marzo, el hombre cambió su declaración y confirmó la historia sobre la presencia del espíritu. De acuerdo con el sujeto, el día de los hechos había escuchado un sonido en medio de la noche y al revisar al bebé lo encontró en el piso con una marca roja en la cara, producto del ataque fantasmal.

Para demostrarlo, el esposo de Ruiz dijo haber tomado fotos del momento, por lo que la policía decomisó sus teléfonos móviles, en los cuales localizaron una confesión de culpabilidad.

Se trata de una conversación en la cual ambos se ponían de acuerdo para montar un relato creíble y sin contradicciones.

Autoridades mencionaron que en mensajes anteriores la mujer aceptaba haber golpeado al menor en la boca porque no quería acercarse a su pecho para darle de comer.

Recientemente, María admitió lo sucedido al declarar que la fractura ocurrió cuando “se despertó aterrada porque el bebé le había vomitado encima.  Lo agarró y lo lanzó hacia una cómoda de madera donde el niño se fracturó el cráneo.

Hasta el momento la joven madre permanece siendo investigada y en detención, mientras que su esposo se encuentra libre, ya que según declaraciones él no sabía lo que realmente había ocurrido y no se presentaron cargos en su contra.

Los hechos ocurrieron el pasado 23 de febrero en Texas, Estados Unidos y pese a la fractura de cráneo y sangrado cerebral, el bebé logró sobrevivir. Actualmente se encuentra al cuidado de la Agencia de Protección al Menor.