Indígenas del municipio de Nahuatzén, cerca de las montañas de Michoacán, se encuentran montando guardias de vigilancia para evitar que las casillas para las próximas elecciones electorales del domingo sean instaladas.

Después de que el gobernador de Michoacán anunciara un operativo policiaco-militar que garantizara las elecciones en su territorio, algunos vigilantes y miembros del consejo indígena se han pronunciado asegurando que están listos para lo que venga.

Ha sido desde el 2011 en que distintos pueblos indígenas han manifestado su oposición a ser gobernados bajo comicios nacionales, por lo que rechazan el sistema y asumen para si mismos un autogobierno, en el que eligen a sus gobernantes, que son miembros de la misma comunidad.

Las comunidades se rigen bajo una máxima autoridad integrada por doce habitantes elegidos por un Consejo Mayor Comunal, no organizan campañas ni cuentan con partidos, todo se dije por los apoyos que brinda cada persona a su comunidad.

Redacción/El Nacional