Ni la titularidad de Mohamed Salah en la Selección de Egipto intimidó a Rusia, quien aparentemente pudieron sellar su pase a los octavos de final al derrotar 3-1 a los faraones, esto a expensas de lo que logre realizar Uruguay con Arabia Saudita.
Los dirigidos por Héctor Cúper tienen muy complicadas las esperanzas de avanzar a la siguiente ronda, pero pese a la derrota derrocharon un buen futbol siendo la puntería el factor determinante en el duelo.
Los anfitriones fueron más contundentes y supieron los momentos para liquidar el duelo, esto en la segunda mitad tras una primera parte demasiado disputada, donde cualquiera de los dos planteles podía irse arriba en el marcador.
Fue hasta el 47’ de tiempo corrido que la desgracia cayó en los egipcios, la mala fortuna les sonrió con el autogol del capitán Ahmed Fathy, que en su intento de despejar un centro de Golovin terminó incrustando la redonda en propia puerta.
La reacción de Salah y compañía quiso ser instantánea pero en su intento de irse al frente Denis Cheryshev aumentó la ventaja, rematando de izquierda desde el centro del área, tras un buen servicio de Mario Fernandes, esto al 59’.
La visita no sentía lo duro sino lo tupido, pues solo tres minutos después la goleada se hacía presente con el tercer tanto ruso, en lo botines del gran Artem Dzuyba, bajando la esférica de pecho dentro del área y quitándose con una recepción al defensor, quedando frente al marco y rematar de derecha y poner el 3-0 lapidario.
Los cambios de Cúper fueron tardíos, pero aún así consiguieron el descuento al 73’ desde los once pasos, jugada que previo fue revisada por el VAR, determinando la pena máxima cobrada de gran manufactura por Salah, haciendo el 3-1 final.
Con este resultado, Rusia está prácticamente en la siguiente ronda, situación contrastante para Egipto que aparentemente ya está eliminado.
Redacción/ El Nacional