En su visita a la Universidad Iberoamericana, Ricardo Anaya aseguró que no está interesado en una declinación de José Antonio Meade, ni en un acuerdo con el Presidente Enrique Peña Nieto, de cara a las elecciones del 1 de julio.
Cuestionado por estudiantes y por el periodista Jorge Ramos, el candidato presidencial de la coalición Por México al Frente endureció su postura frente al Gobierno de Peña, al que calificó como corrupto.
“No me interesa ser el candidato de la continuidad de este Gobierno. Yo aspiro a representar un cambio profundo, algo totalmente diferente”, dijo.
Anaya respondió así a la pregunta de una estudiante de la Prepa Ibero, quien cuestionó si, en caso de que Meade declinara por él en la recta final de la campaña, eso implicaría perdonar los casos de corrupción de gobernantes priistas.