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Redacción/El Nacional

Artistas y escritores cubanos ven con ilusión la apertura con EEUU y esperan que abra un nuevo camino para que la producción cultural de la isla amplíe fronteras sin las restricciones de un embargo que limita la difusión de películas, discos o libros en el país vecino.

Como parte del histórico acuerdo entre Cuba y Estados Unidos para retomar vínculos diplomáticos, rotos desde 1961, el presidente Barack Obama anunció el pasado 17 de diciembre que los viajes de estadounidenses a la isla por motivos académicos, culturales o religiosos están permitidos sin necesidad de un permiso especial.

Ya en 2011, con el objetivo de propiciar los llamados “contactos pueblo a pueblo”, Obama flexibilizó las restricción de viajar a la isla por esos motivos, lo que se tradujo en un notorio aumento de visitantes estadounidenses a Cuba en los últimos años y supuso el inicio de algunos proyectos culturales conjuntos.

Esa medida propició “una comunicación y un intercambio cultural que benefició a todos, incluida la comunidad cubana de Miami”, según recordó el reconocido novelista Leonardo Padura en declaraciones a una agencia de noticias.

Ahora, con la nueva etapa que se abre con EEUU, el autor de “El hombre que amaba a los perros” considera que “tanto la cultura como el deporte van a ser los primeros beneficiados de este cambio”.

Padura recordó a los artistas cubanos que trabajan en Estados Unidos que no pueden regular su actividad con contratos y “tienen que cobrar de manera medio alternativa”.

“Creo que todo esto es un signo de que a través de la cultura es posible dialogar, acercarse y tener una relación mucho más armónica”, subrayó Padura.

El actor y director afirmó que todavía es “prematuro” pensar que Hollywood se abre a Cuba porque “el bloqueo todavía existe”, aunque admitió estos cambios favorecerán a la industria cinematográfica cubana, “que tiene una historia muy importante y donde hay mucho talento”.

Con más fluidez que actores y cineastas, los músicos cubanos han viajado al vecino del norte, aunque no exentos de dificultades- “Cuando das un concierto no puedes regular la actividad por un contrato y te tienes que fiar de la buena voluntad del promotor para cobrar”, explica el cantante y compositor Kelvis Ochoa.