Frente a un estadio deportivo un coche bomba explotó matando a 14 personas e hirió a otras 45.
Aminhullah Abed, el jefe del departamento de salud pública de la provincia, afirmo que las victimas se recibieron en un hospital, con seis heridos e estado crítico y muchos otros quemados sin tener posibilidad de ser reconocidos.
La explosión ocurrió en una de las celebraciones afganas del año nuevo terminaran y los juerguistas volvieran a casa.
No hubo funcionarios de alto rango presentes en el estadio.