Lo que más llama la atención de esta película, es que mientras que Estados Unidos, y el propio presidente, Donald Trump, implementa una política racista, la industria del cine le abre la puerta a la diversidad de razas. ¡Bien Marvel!
Feminismo, discriminación y política, son los temas más fuertes que toca la nueva entrega de Marvel, ‘Black Panther’ (Pantera Negra), la cual se estrenó ayer 16 de febrero y espera una recaudación de 135 millones de dólares durante su fin de semana de estreno.
La película se lanza en el mes de la historia afroamericana, la cual resalta la belleza y nobleza de las personas negras.
El nombre del personaje ‘Black Panther’ es T’Challa, y es el rey del reino africano Wakanda, una nación lo suficientemente poderosa como para rechazar a las fuerzas del imperialismo occidental.
Wakanda es independiente, avanzado y rico en recursos y sobre todo abunda el vibranium, material ficticio del que está hecho el escudo del Capitán América.
Pantera Negra, fue uno de los pocos cómics de superhéroes con personajes negros como protagonistas. Y fue el primer comic de superhéroes negros con una editorial de comics. Había quedado guardado por 50 años en los cajones y ahora Ryan Coogler (cineasta) lo trae de vuelta, pero a la pantalla grande.
No cabe la menor duda, de que esta película tiene el potencial de inspirar no solo a la comunidad afroamericana en Estados Unidos, sino también a la comunidad en general, incluidos los inmigrantes africanos, caribeños y afro latinoamericanos, incluso a la diáspora africana.
Y lo más importante es que es un gran recordatorio de lo que representa la raza negra para la industria del cine, la música, y el arte en Estados Unidos.
“Creo que no tenemos que diseccionar tanto la película con sus aspectos políticos o raciales. Hay que ver esto con una normalidad y saber apreciar que es una buena película”, dijo el actor Chadwick Bosema, quien interpreta a dicho héroe.