Después de una serie de ataques en el norte del país que dejo como saldo siete policías muertos y decenas de heridos, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha suspendido las negociaciones de paz que mantenía con el Ejército de Liberación Nacional (el mayor grupo guerrillero en Colombia).
“Mi paciencia y la paciencia del pueblo colombiano tienen sus límites, por lo tanto he tomado la decisión de suspender la instalación del quinto ciclo de negociaciones que estaba prevista para los próximos días hasta que no vea coherencia por parte del ELN entre sus palabras y sus acciones”, dijo Santos en un acto de gobierno.
Las negociaciones de paz entre el gobierno y el ELN iniciaron en Ecuador el año pasado, intentando dar por terminada el conflicto interno que desde hace medio siglo ha dejado más de 220 mil muertos.
Sin embargo, se vieron suspendidas después de que tras tres meses de un cese al fuego, el grupo rebelde reactivara sus ataques contra las Fuerzas Armadas.
El ELN cometió tres ataques en Barranquilla en el que murieron siete policías y 47 resultaron heridos.