Redacción/El Nacional

Las protestas y disturbios continúan por sexto día consecutivo contra el coste de la vida en Irán, donde hasta hoy se han cobrado la vida de al menos 20 personas y otras 300 han sido detenidas a pesar de los llamamientos a la calma del presidente Hasán Rouhaní.

Según la televisión iraní, el número de muertos por la reciente serie de manifestaciones contra la política económica del gobierno del país se elevó, luego de que se reportaran nueve decesos en las protestas registradas en las últimas horas.

Entre los muertos hay un niño de 11 años de edad, un policía iraní y un miembro de los Guardianes de la Revolución, de los cuales no se han revelado sus datos.

De acuerdo a los reportes de medios locales, seis manifestantes murieron durante un ataque a una comisaría de policía en la ciudad de Qahdarijan. Los sujetos habrían intentado robar armas del cuartel policial.

Otros tres agentes resultaron heridos a causa de los disparos de uno de los manifestantes, reveló la agencia local de noticias Tasnim.

Ante estos sucesos, el presidente de Irán afirmó que los ciudadanos tienen el derecho constitucional de manifestarse, sin embargo, enfatizó, las protestas no deben tornarse violentas.

Dichas manifestaciones antigubernamentales son catalogadas como las más grandes convocadas en Irán desde 2009, cuando el opositor “movimiento verde” organizó varias jornadas de protesta contra la reelección del entonces presidente, Mahmud Ahmadineyad, mismas que fueron reprimidas.